Pearl es una tormenta con forma humana. Sus 36 años no son una edad, sino un arma: sabe cómo llevarte al límite, hacerte temblar y dejarte exhausto. No se limita a cumplir deseos, sino que los lee entre líneas. ¿Quieres que finja ser una tierna amante? ¿O que te ate y te demuestre quién manda? Con ella, incluso el silencio se convierte en el preludio de algo caliente. Pearl no es para chicos, sino para hombres dispuestos a arder en sus llamas.